Estudié ingeniería técnica forestal y desde 1999 trabajo como albañil empelando casi siempre, la tierra como material de construcción tradicional, adobero, tapiador, apasionado de aprender y de enseñar.

En 1999 participé en la construcción de mi propia vivienda y otras nueve más, para una cooperativa de la que formo parte. Uno de los criterios para su construcción fue utilizar materiales sostenibles y tradicionales como la tierra y la madera. Durante los dos años que duró la obra pasé por todos los puestos y en este proceso de formación combiné diferentes técnicas: tapia, adobe, BTC, carpintería de armar y mampostería de piedra.

Llegó un momento en el que necesitaba un pequeño stock de materiales y monté «Obras con Calma – Adobera del Norte», en la que elaboro los adobes y bloques de tierra compactada que posteriormente utilizo en mis obras o los distribuyo y comercializo a otras empresas.

Empleo el nombre de Obras con Calma cuando me dedico a construir. El nombre lo dice casi todo y hace referencia a las técnicas tradicionales que utilizo y que no admiten ni la prisa ni la pausa.

Me pongo el traje de Adobera del Norte cuando fabrico adobes y bloques de tierra compactada, también cuando levanto tapia de tierra compactada o cuando vendo productos a base de tierra como los morteros.

Con el traje de Servicios Integrales para la Construcción con Tierra, me ocupo del asesoramiento en obra, la formación a profesionales, el diseño de mezclas para tapias o morteros y el alquiler de maquinaria específica para la construcción con tierra como pisones neumáticos, prensas, mezcladoras…

En este momento de mi carrera aspiro a dedicar menos tiempo a Obras con Calma, para centrarme más en la producción y en la formación, aunque no digo que no a una obra atractiva.